Actualmente existen normas técnicas que proporcionan a la industria alimentaria tener niveles de calidad en los procesos desarrollados, ya que establecen, las condiciones mínimas que debe reunir un producto, proceso o servicio, para que sirva al uso al que está destinado.
Los productos alimenticios elaborados conforme a normas técnicas;
Facilitan el comercio,
Son más aptos para el consumo humano,
Inocuos,
De buena calidad,
Poseen información para guiar al consumidor,
Colaboran en la regulación del mercado,
Promueven el desarrollo económico y la confianza de los ciudadanos.
Y si estas normas están alineadas a las normas internacionales, facilitan el acceso a los mercados de exportación, estableciendo criterios comunes que permiten innovar, prever y mejorar los productos.